“La doctrina del shock” (2007) es una historia sobre el
libre mercado y cómo el
capitalismo se ha usado como herramienta para ejercer violencia contra el
individuo. Una de sus conclusiones es que las empresas deben ser
controladas antes de que acaben con el planeta. Comienza con el laboratorio de la torturapara erradicar y luego recrear la mente humana, fracasa de la misma manera que han fracasado las ideologías neoliberales para hacer un mundo mejor.
Pasa revista detallada a catástrofes como el Katrina en 2005; al Chile de Pinochet asesorado por Milton Friedman; aThatcher ensalzando el nacionalismo britanico en la guerra de las Malvinas; el golpe de estado civil en Bolivia; la dictadura de la deuda en la Argentina de Alfonsín.
La población está dispuesta a entregar un poder inmenso a cualquiera que afirme disponer d ela cura mágica, así se explica la pasividad d ela mayoría empobrecida. Con la caída de la URSS el capitalismo occidental ve un inmenso territorio virgen; China, Sudáfrica, Rusia, Irak,
Los países europeos con sus solidos sistemas de protección social y laboral, sus potentes sindicatos y su sanidad socializada surgieron precisamente del compromiso entre comunismo y capitalismo. Hoy el comunismo ya no es una amenaza. El capitalismo se quita la máscara.
Los Tigres asiáticos Corea del Sur, Taiwan, Singapur y Hong Kong en quiebra, deudores del FMI tampoco pudieron oponerse a la medicina: servicios básicos privatizados, liberalización total del comercio, fuerzas laborales flexibles, etc...
Enormes ganacias gracias al terror al terrorista, en Gran Bretaña se han instalado 4,2 millones de camáras de vigilancia, en estados Unidos 30 millones. Y se crea un mercado boyante para ver esas miles de horas de grabación, control y recopilación de datos que no está en manos de los gobiernos pero que pagamos todos. Han conseguido tras el 11S que el miedo al terrorismo sea mayor que el miedo a vivir en una sociedad vigilada.La economía es la razón número uno del terrorismo y de la falta de seguridad.
La Administración Bush, como la del PP/PSOE, se caracterizan por escándalos de corrupción, puertas giratorias gobierno-empresa, aumento de asesores externos, menosprecio de funcionarios expertos. Todos ellos, contratistas y subcontratistas cobran del contribuyente, pero esta economia paralela escapa a los controles de quienes la sufragan, tampoco se responsabiliza de las pérdidas. Y mientras...el verdadero E
stado pierde su capacidad de llevar a cabo sus funciones básicas sin la ayuda de los contratistas.
El último capítulo, El shock se gasta se quiere esperanzador, los nuevos gobernantes de América latina han aprendido la lección, intentan recuperar mediante nacionalizaciones lo que les han robado, son solidarios y democráticos. El Chile de bachelet, el Brasil de Lula, la Bolivia de Evo Morales, la Venezuela de Hugo Chávez, la Argentina de Kirchner...eso era en 2007.
Hoy en Europa los partidos de extrema derecha ganan adeptos y llegan al poder, en Estados Unidos Trump amenaza las relaciones comerciales con el resto del mundo y sigue mirando a Irán. En América del Sur los gobiernos de izquierda han ido cayendo y los que permanecen se tambalean.