Colección Masaveu
Silencio Jaume Plensa |
Los Masaveu, originarios de Cataluña (Castellar
del Vallés) se trasladaron a Asturias a principios del siglo XIX. En
1840, Pedro Masaveu Rovira fundó Banca Masaveu. Desde el principio
fueron aficionados al arte, pero el grueso de la coleeción actual se
debe al empresario asturiano Pedro Masaveu Masaveu (1886-1968),
asesorado por Lafuente Ferrari, y que continuaron sus herederos.
Tras
la muerte, sin descendencia, de Pedro Masaveu Peterson en 1993, quedó
al frente de la corporación su hermana María Cristina que, pocos meses
antes de morir, en 2006, creó una fundación con su nombre.
El comisario de la exposición, Javier Barón, jefe de Conservación de
Pintura del Siglo XIX del Museo del Prado, destaca de este recorrido,
iniciado con Goya con obras como Banderilleros (Suerte de banderillas),
de 1793, “que recoge a los grandes artistas españoles nacidos en el XIX
antes de Picasso”. Destaca la presencia de Sorolla, con 25 obras, y 10
de Anglada Camarasa. “Hay tres zuloagas, tres madrazos, cuatro piezas de Vicente López, tres regoyos…
Es una visión cronológica pero que se diversifica en los temas: el
paisaje realista, el ocio, la mujer… hasta llegar a la antesala de las
vanguardias en el siglo XX”, añade. Rosales, Mariano Fortuny, Ramón
Casas, Santiago Rusiñol o Isidro Nonell son otros de los artistas que
completan esta visita a la pintura española del XIX, “hoy considerada
como un documento histórico de valía porque representaba la realidad, a
las mujeres y hombres y las ciudades”, subraya.
La familia de don Rafael Errázuriz Urmeneta', (1905),Sorolla |
“Es una aproximación a un siglo que, aunque no lo parezca, no es tan
conocido como el Siglo de Oro, Goya o Picasso. Se va a poder comprender
bien su riqueza, poco valorado a veces”. Otro aspecto que Barón destaca
del conjunto es que “muchas obras fueron recuperadas de subastas en el
extranjero, por lo que hay varias que se podrán ver por primera vez en
España”.
Además, el visitante se encontrará con la sorpresa de varios ejemplos
de arte contemporáneo en el interior y los patios del palacete. “Están
separadas del recorrido expositivo. Una es Silencio, que
representa el rostro de una niña que se cubre la boca y cierra los ojos,
de 14 metros de altura, del artista barcelonés Jaume Plensa, hecha para
uno de los patios”.
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire