El zar Saltán Pushkin

Tres muchachas  cosían tarde, ya por la noche, junto a una ventana.

- Si yo fuera la zarina -dijo una d elas muchachas-, prepararía un festín para todos los cristianos.

- Si fuera yo la zarina- dijo su hermanita-, yo solita tejería tapices para todo el mundo.

- Si yo fuera la zarina- afirmó la tercera hermanita-, daría a luz un bogatyr para nuestro zar.

En apenas cincuenta páginas (con bellísimas ilustraciones de Iván Bilibin, grande de la ilustración rusa de principios del siglo XX. Bilibin fue uno de los mejores ilustradores rusos del siglo XX, con un estilo preciosista basado en los motivos tradicionales rusos, orientales y en el Art Nouveau; y atinadísima versión de Enrique Moya Carrión) Pushkin, al hilo de la narrativa popular rusa, nos sumerge en un mundo mágico y maravilloso, repleto de significaciones y metáforas, donde luchan enconadamente las fuerzas del Bien y el Mal. Una obra pequeña, pero eterna.