jeudi 17 janvier 2008

Castillos de Cartón de Almudena Grandes

El tres es un número impar.
-Es para ti, María José... Jaime González.
Despues de trabajar más de quince años en el mismo departamento, todavía no había conseguido tener una secretaria para mí sola. Lorena, joven y atolondrada, pero voluntariosa, repartía su tiempo entre mis exigencias y las de Julián, un doctor en Historia del Arte, callado, taciturno y especialista en escultura barroca española -especifícamente Alonso Berruguete-, que recepcionaba y tasaba más o menos de todo, igual que yo, pero sufriendo. A mí, en cambio, y a aquellas alturas, lo mismo me daba el azar que la necesidad. La empresa me había contratado como experta en pintura contemporánea y me pasaba la vida valorando joyas isabelinas, bargueños, bronces franceses del XVIII, y lo que me echaran. Yo quería ser pintora y descubrí a destiempo que no tenía talento suficiente.

Aucun commentaire: