Leones por corderos

La última peli de R.Redford parte de una buena intención, puede que en USA se la tilde incluso de subversiva, en Europa, no aporta nada nuevo. Salvo ver a los tres "grandes" el más creible es Tom Cruise en su papel de ambicioso congresista amigo de Bush. Redford ya no tiene edad para ejercer la docencia, resulta poco creible.